Precio reducido: La “época dorada” de un modelo resiliente
Daniela JubizEn un panorama global definido por la incertidumbre económica, la inflación y las tensiones comerciales, pocos formatos minoristas pueden presumir de un crecimiento constante.
Sin embargo, el modelo de precios reducidos —el que ofrece marcas conocidas a precios reducidos— está entrando en lo que muchos analistas describen como su “época dorada”.
El caso de TJX Companies (matriz de TJ Maxx, Marshalls y TK Maxx) es revelador. Mientras muchos minoristas tradicionales ven sus márgenes reducidos por los aranceles y los costos de importación, TJX aprovecha la flexibilidad operativa y una experiencia de compra atractiva para fortalecer su liderazgo.
¿Por qué los precios bajos están en auge?
- Resiliencia a los aranceles y los costos externos
Casi el 90% del inventario de TJX proviene de proveedores externos que gestionan la importación y absorben los aranceles. Esto protege la estructura de precios de la empresa y su rentabilidad. - Resultados que hablan por sí solos
En el segundo trimestre de 2025, TJX registró un crecimiento de ventas netas del 7% , elevó su orientación anual y vio sus acciones alcanzar máximos históricos, lo que contrasta marcadamente con el estancamiento que enfrentan muchos competidores. - La magia de la “búsqueda del tesoro”
Más allá de los precios, las tiendas con descuento ofrecen algo que los algoritmos del comercio electrónico no pueden replicar: la emoción del descubrimiento. Recorrer los pasillos, descubrir nuevas marcas y conseguir piezas únicas convierte la compra en un ritual emocional. - Expansión con enfoque demográfico
Con la apertura de 130 nuevas tiendas este año , TJX está llegando a consumidores más jóvenes y diversos que equilibran el gasto consciente con el deseo de accesibilidad y emoción.
Una lección para el comercio minorista global
El auge de los precios rebajados no es casualidad: refleja una cultura de consumo en transición. En un clima donde la cautela financiera coexiste con las aspiraciones estéticas, los compradores buscan valor y experiencia por igual .
Para las marcas, las conclusiones son claras:
- Competir sólo en precio no es suficiente: las experiencias deben fomentar la conexión.
- La agilidad de la cadena de suministro es tan estratégica como la marca.
- El consumidor de hoy anhela variedad, sorpresa y autenticidad, incluso con descuento.
En conclusión
Los precios reducidos demuestran que, incluso en tiempos turbulentos, el comercio minorista puede prosperar cuando se adapta a los cambios culturales. Más que un simple canal de descuentos, se ha convertido en un espacio aspiracional y accesible donde el pragmatismo económico se une al deseo emocional.